martes, 13 de marzo de 2007

Inicio


Partir de la simple acción de recolectar, donde cierta necesidad la despertó en algún momento primitivo.

Acumular, crear un almacén de recursos, de gustos, de curiosidades, de ideas, de recuerdos, de simpatías.

Este proyecto habla sobre el vínculo, la confianza en la traducción de información, la comunicación activa viva también en los silencios profundos.

En esta gran vidriera de posibilidades, una propuesta es solo una más que será descargada en la medida que se la necesite. Tomaremos una o algunas propuestas y también brindaremos una o varias.

Me planteaba en una charla Esteban, sobre las propuestas de cambios que dispersa uno como artista para una sociedad pero que ésta le da la espalda o simplemente unos pocos la toman. Pensar entonces hacia donde van los intereses o si estas utopías (llamándole de alguna manera a nuestra moción) son o no inclusivas de los intereses de los otros. ¿Le interesa a la gente descargar para su almacén esta nueva manera de ser artistas de prácticas?

No olvido el comentario de amigos en un cumpleaños días atrás: “… estos artistas de cualquier situación arman obra, y con eso van de aquí para allá y la pasan bomba”. Hay una confianza que nos une, también hay una necesidad de entender desde donde hace el otro lo que hace, por que elige tal o cual cosa. Después seguimos tomando unos Daikiris que estaban bárbaros y nos alegraban bastante, como si celebrar fuese mucho más importante y nos miramos cómplices "... y sí, hay que pasarla bomba!"

Aquí comienza entonces el transito por los caminos que se cruzan en el encuentro.

Marco

Paraná, martes13 de 2007